El mercado regulado del iGaming despega en Ontario a pesar de las dificultades

El martes, las autoridades de Ontario, la provincia más poblada de Canadá, calificaron el primer año del iGaming como un éxito. Se trata de un mercado competitivo de apuestas deportivas y casinos en línea. Sin embargo, también subrayaron que aún queda trabajo por hacer para garantizar la viabilidad a largo plazo del experimento de iGaming de la provincia.

El experimento del iGaming en Ontario: Primer año exitoso

En abril de 2022, Ontario puso en marcha un mercado regulado de juegos de azar en línea. Este permitía participar a múltiples operadores de webs de juego del sector privado. El mercado está supervisado por la Comisión de Alcohol y Juego de Ontario (AGCO en inlgés) e iGaming Ontario (iGO). Se trata de una agencia gubernamental que firma acuerdos operativos con las casas de apuestas.

Durante un acto de aniversario celebrado en Toronto y organizado por la Asociación Canadiense del Juego, la directora ejecutiva de iGO, Martha Otton, expresó su satisfacción por el primer año de la iniciativa. Sin embargo, también reconoció que queda trabajo por hacer para que la industria del juego siga prosperando y sobreviviendo. Según Otton, el gobierno provincial le ha dado a la iGO un mandato cuyo objetivo es ofrecer a los jugadores opciones y protección, así como generar ingresos para la provincia. Las cifras de la iGO, publicadas el martes, sugieren que la agencia está logrando estos objetivos. Desde que se lanzó el año pasado con 12 operadores, el mercado competitivo de Ontario ha crecido hasta incluir más de 40 empresas que ofrecen apuestas deportivas, juegos de casino y póquer legales. En el primer año del mercado, iGO registró más de 35 mil millones de dólares en apuestas y alrededor de 1,4 mil millones de dólares en ingresos totales generados por el juego. De ellos, aproximadamente el 20% fueron a parar a la provincia. Estas cifras colocan a Ontario entre las cinco principales jurisdicciones de iGaming en América del Norte. Otro estado como Pensilvania, reportó ingresos de iGaming de aproximadamente 1,5 mil millones para el año fiscal 2021-22.

El mercado regulado del juego atrae clientes y se enfrenta a la actividad no regulada

El mercado regulado de la provincia también ha conseguido atraer a los clientes de los operadores “grises” sin regular. Según una encuesta reciente encargada por la iGO y la AGCO, el 85,3% de los jugadores en línea encuestados habían apostado en webs reguladas en los últimos tres meses. Esto supone un cambio significativo con respecto al 70% estimado de apuestas en línea que se realizaban en webs no reguladas antes de lanzarse el mercado. La AGCO señaló en un comunicado de prensa que se trata de un avance positivo para el sector y para la protección de los jugadores. Aunque el mercado del iGaming en Ontario ha conseguido generar ingresos y ofrecer opciones a los jugadores, aún quedan varios problemas por resolver. La actividad no regulada sigue siendo motivo de preocupación para los controladores, y al sector le gustaría que se hicieran ajustes en el mercado competitivo. La reciente salida de Coolbet de Ontario ha suscitado cierta polémica. Para hacer frente a estas preocupaciones, la directora Otton, ha mencionado que el organismo está tratando de racionalizar sus operaciones mediante la automatización y fomentar la innovación en el mercado del iGaming. Sin embargo, el juego responsable sigue siendo una prioridad y la iGO está trabajando en una lista de autoexclusión centralizada que permitirá a los jugadores autoexcluirse de todas las webs. Se planifica un registro común de autoexclusión para el futuro con datos de los operadores. Dave Forestell, presidente del consejo de administración de la iGO, señaló que la agencia ha aprendido varias lecciones durante el primer año. Por ejemplo, se abordarán las comisiones bancarias que los operadores se quejaban de que eran demasiado elevadas. Forestell también reconoció la necesidad de compartir más datos sobre el juego responsable y el mercado comercial y de dificultar que los operadores ilegales ofrezcan su producto en Ontario. También se está elaborando una hoja de ruta tecnológica para el futuro.

Preocupación por prohibir la publicidad

Algunos miembros de la industria del juego esperan que los reguladores de Ontario reconsideren su prohibición de publicitar bonos, apuestas gratuitas y otros incentivos al juego. Las normas de iGaming establecidas por la AGCO impiden la amplia promoción de estos incentivos. Así, permiten únicamente que los clientes tengan conocimiento de ellos en la web de un operador o a través de publicidad directa que los jugadores deben elegir recibir. Este planteamiento supone dificultades a los afiliados de marketing como Covers, que proporcionan información a los apostantes sobre la calidad de las casas de apuestas deportivas, incluidas las promociones que puedan ofrecer. Los afiliados pueden hablar de los pros y los contras de una casa de apuestas deportivas de Ontario sin tener en cuenta los incentivos. Según Andrew Garven, responsable de marketing de Covers, esto limita a los consumidores y no les da suficiente información para tomar decisiones con conocimiento de causa, dada la amplia gama de ofertas y operadores. Durante un panel de afiliados, Dave Phillips, director de operaciones de la AGCO, reconoció que el primer año había sido “muy exitoso”, a pesar de la preocupación por el impacto del mercado no regulado y los retos que plantea la legislación canadiense. Phillips indicó que la AGCO seguiría vigilando el cumplimiento normativo y colaborando con los operadores. Añadió que nadie podía afirmar que el mercado fuera perfecto, ya que está en continua evolución y aún queda mucho camino por delante. A pesar de las dificultades, el crecimiento del iGaming en Ontario también beneficia a la Corporación de Lotería y Juego de Ontario (OLG). Esto se debe a que tanto los operadores del sector privado, como la OLG, informan de más de 1,6 millones de cuentas de jugadores activos en sus plataformas digitales. Dave Pridmore, director general de juego de OLG, informó de cifras récord de ingresos gracias a los 1,6 millones de jugadores registrados en sus ofertas digitales. El negocio del juego digital de la OLG proporcionó un beneficio neto a la provincia de 223 millones de dólares en el ejercicio fiscal, un 23% más que el año anterior. Los ingresos de la corporación por esta unidad aumentaron un 45% interanual, hasta 427 millones de dólares. La entrada de docenas de competidores en el mercado dio a la OLG un impulso para intensificar sus esfuerzos, según Pridmore, y “revitalizó a la OLG para pensar realmente en nuestras ofertas digitales”.

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